Sí, así de simple: Apple ha fabricado una caja de pizza, cuyo diseño ha patentado, para que sus empleados puedan llevarse a casa en óptimas condiciones las pizzas que piden en la oficina. Se trata de un producto menor y no tiene intención de comercializarlo, pero estará a disposición de sus empleados en la nueva sede de la manzana que inaugurarán a lo largo de 2017.

La caja de pizza es redonda (normalmente suelen ser cuadradas) y está diseñada para que el aire pueda circular por el interior, evitando así que la humedad y el calor ablanden la pizza. La patente de la caja lleva ya siete años registrada, pero no ha sido hasta ahora cuando la compañía ha creído oportuno diseñarla. De hecho, no es el primer producto cotidiano que Apple desarrolla: a finales del año pasado Tim Cook, actual director ejecutivo de Apple, patentó una bolsa de papel, con el propósito de ser cada vez más sostenible, que muy posiblemente ya hayan utilizado en sus tiendas.

Construida a partir de materiales reciclados, la caja de pizza de Apple dispone de ocho agujeros situados en la tapa superior y de un sistema de sujección que permite transportar el alimento de forma segura.

Esta nueva invención de la compañía se suma a la batería de mejoras que la empresa está desarrollando para su nueva sede, la ya conocida como Apple Park. Todavía se están perfeccionando los últimos detalles, pero todo apunta a que hasta el último pomo de la última puerta estará perfectamente estudiado. Aunque sólo sea por los 5.000 millones de dólares que le ha supuesto a la compañía levantar el edificio y la forma de nave espacial que presenta su estructura, valdrá la pena contemplar el bastión tecnológico una vez esté operativo.